Los eclipses, antes venerados o temidos, se han convertido en la actualidad en un espectáculo de masas. Un espectáculo cósmico en que la Luna se interpone entre la Tierra y el Sol. Aunque la Luna es 400 veces más pequeña que el Sol, está 400 veces más cerca, así que la superposición de ambos es casi perfecta. Este lunes, el satélite ha tapado los rayos de luz del astro, proyectando una sombra que ha cruzado en diagonal toda Norteamérica, desde Mazatlán (México) hasta Terranova (Canadá). En Little Rock (Arkansas, Estados Unidos), un punto intermedio en la senda del eclipse total, miles de personas se han reunido para ver apagarse y encender al sol de forma mágica.
Ante la expectativa por el suceso astronómico, también han ido apareciendo noticias falsas en torno a las causas y efectos que puede traer un eclipse a los seres humanos.
En ese sentido, la NASA a través de su sección web dedicada a los eclipses, aclaró estas dudas.
Una idea que se tiene sobre los eclipses solares totales es que producen rayos dañinos que pueden causar ceguera.
Respecto a ello, la NASA explicó que durante la etapa de totalidad de este evento astronómico, es decir cuando el disco de la luna cubre completamente el sol, la corona brillante emite sólo radiación electromagnética, aunque a veces con un tono verdoso.
“Los científicos han estudiado esta radiación durante siglos. Al ser un millón de veces más débil que la luz del sol, no hay nada en la luz de la corona que pueda atravesar 150 millones de kilómetros de espacio, penetrar nuestra densa atmósfera y causar ceguera”, señaló el organismo estatal.
No obstante, la NASA detalló que si se observa el sol antes de la totalidad, se vislumbrará la brillante superficie solar y esto puede causar daño a la retina. “Aunque la respuesta instintiva humana típica es mirar hacia otro lado rápidamente antes de que realmente haya ocurrido algún daño grave”, agregó.
Por otra parte, desmitificó la creencia acerca de que una mujer embarazada no debe ver un eclipse porque puede causar daños al bebé que lleva en su vientre. “Esto está relacionado con la falsa idea de que durante un eclipse solar total se emiten radiaciones nocivas”, explicó en referencia a la emisión de neutrinos, que son partículas que salen sin obstáculos del sol hacia el espacio.
“Cada segundo, tu cuerpo recibe billones de estos neutrinos, sin importar si el sol está encima o debajo del horizonte. Cada pocos minutos algunos átomos de su cuerpo se transmutan en un isótopo diferente al absorber un neutrino. Este es un efecto completamente inofensivo y no le dañará a usted ni, si está embarazada, al feto en desarrollo”, remarcó la NASA.
Finalmente, la agencia estatal rechazó la idea acerca de que los eclipses envenenan cualquier alimento que se prepare durante el evento.
“Si alguien se intoxica accidentalmente con ensalada de patatas durante un eclipse, algunos podrían argumentar que el evento estuvo relacionado con el eclipse en sí, aunque cientos de otras personas en el mismo lugar no se vieron afectadas en absoluto”, comentó la NASA sobre este mito.
La senda
La senda del eclipse total ha tocado tierra en Mazatlán (México), en la costa del Pacífico, a las 14:07 (hora de Bolivia). Tras dejar su sombra en Durango, Torreón y Monclova, ha cruzado a Estados Unidos por el agitado paso fronterizo de Eagle Pass a las 14:27 (HB). En Texas ha cubierto también San Antonio, Austin y Dallas pasado el mediodía. En su camino hacia el norte, ha oscurecido Little Rock (Arkansas) antes de continuar hacia Indianápolis (Indiana), Cleveland (Ohio) y Búfalo (Nueva York). En la frontera con Canadá, la senda de totalidad cubre de lleno las cataratas del Niágara, roza Toronto y tapa el sol por completo en parte de Montreal antes de dirigirse al Atlántico Norte por Terranova. Las localidades de Cape Girardeau (Misuri) y Carbondale (Illinois), que ya estuvieron en la senda del eclipse en 2017, han repetido en 2024.