Luis Fernando Camacho tomó nota de la posición del gobierno argentino con respecto a la relación entre Bolivia e Irán, al calor de un conflicto bilateral entre este último país e Israel.
Es por eso que, desde el penal de Chonchocoro, el gobernador electo de Santa Cruz se mostró inquieto.
En un tuit, Camacho comenzó exponiendo que Bolivia suma la desconfianza de países vecinos.
«A la crisis de confianza interna en Bolivia por la inestabilidad económica y la inseguridad jurídica, se suma la desconfianza de los países vecinos que ven con preocupación los acuerdos militares con Irán, acuerdos que el Gobierno de Luis Arce normalmente oculta».
Expresó que nuestro país requiere de lazos con naciones que enaltezcan los valores de la democracia. «Bolivia necesita aliados que defiendan las instituciones y los valores de la democracia, que inviertan en el país, que amplíen los mercados para nuestros productos, que aporten tecnología y desarrollo. No necesitamos acuerdos oscuros con países y con dictaduras subdesarrolladas. Bolivia necesita un cambio».
Esto se da después de que la ministra de Seguridad de Argentina, Patricia Bullrich, argumentara que Bolivia firmó un memorándum con el país islámico, además de que en el Estado boliviano habría presencia de las fuerzas de élite iraníes llamadas Quds.
De inmediato, la Cancillería de nuestra nación, liderada por Celinda Sosa, calificó las declaraciones de Bullrich como “desafortunadas y equivocadas”.
