Bolivia empezó este 2024 con una variación mensual del Índice de Precios al Consumidor (IPC) —que mide la inflación—de 0,08% en enero, respecto a diciembre de 2023, informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El incremento de 0,08% del IPC se explica, principalmente, por la variación positiva de los precios en educación; recreación y cultura; bienes y servicios diversos; salud; comunicaciones; alimentos y bebidas consumidas fuera del hogar; muebles, bienes y servicios domésticos; y transporte.
Según el informe del INE, el aumento de precios se dio, sobre todo, en las ciudades capitales y conurbaciones: Tarija llegó a 0,62%; Potosí 0,25%; Trinidad 0,22%; Conurbación La Paz 0,15%; Sucre 0,14%; Oruro 0,13% y Conurbación Santa Cruz, con 0,04%.
Los bienes y servicios con mayor incidencia positiva, o sea que más subieron de precio en enero fueron los productos de papelería, zanahoria, cebolla, educación superior universitaria, carne de res sin hueso y aparato telefónico móvil/celular.
Por el contrario, los productos con mayor incidencia negativa (disminución) fueron papa, haba verde, uva, huevos, carne de pollo y achojcha.
Los productos que presentaron una disminución de precios, en enero, alcanzaron el 33%; los que no presentaron movimiento de precios representaron el 14,4%. Mientras que los que presentaron un aumento de precios representaron el 52,6%.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) es un indicador que mide la variación mensual de los precios de un conjunto de bienes y servicios representativos del gasto que realizan los hogares.
Bolivia terminó 2023 con una inflación acumulada de 2,12%, menor a la registrada en 2022, cuando alcanzó a 3,12%, informó el Gobierno el mes pasado.
En diciembre de 2023, el Índice de Precios al Consumidor registró un incremento del 0,63% respecto a noviembre.
El Gobierno resaltó que Bolivia se mantenía hasta noviembre de 2023 como uno de los países con la inflación más baja de la región.
