Ante la reducción del caudal de los pozos que abastecen de agua a los vecinos, el municipio de Colcapirhua aceleró las gestiones para recibir y distribuir el líquido vital de la represa de Misicuni.
El alcalde Nelson Gallinate informó ayer que, en octubre, se tiene previsto firmar un convenio con la Empresa Misicuni para dotar agua potable a los barrios de reciente creación o a los que soliciten la cobertura del servicio básico.
La autoridad mencionó que para distribuir agua a las juntas vecinales se trabaja en la conformación de la empresa municipal Manka Llut’as, que también se hará cargo de la administración del servicio de alcantarillado.
“Los niveles freáticos de agua han bajado en los pozos de muchas zonas, por ejemplo, en Santa Rosa y en la urbanización Avaroa. Por eso, queremos dar el impulso para la dotación de agua de Misicuni”, puntualizó.
Gallinate detalló que entre las comunidades interesadas están Cuatro Esquinas, Callajchullpa, Collpapampa, Kami, Don Bosco, 23 de Marzo y Willcataco.
Adelantó que el municipio prioriza, para el próximo año, la ejecución de redes internas de distribución con recursos económicos propios, aunque no especificó el monto.
El alcalde hizo el anuncio en medio de una protesta que protagonizaron ayer los regantes del río Chijllawiri y los socios de la Cooperativa San Lorenzo para exigir la dotación directa del agua de Misicuni. Con la medida de presión, se logró la firma de un acuerdo en el que se establece que la empresa municipal no dotará agua al casco viejo.
Niegan descarga de aguas servidas
La Unidad de Saneamiento Básico de Colcapirhua comunicó ayer que no existe descarga de aguas residuales al río Chijllawiri y que se acordó una inspección con los regantes que usan el agua del afluente para que verifiquen si hay conexiones clandestinas de alcantarillado.
La aclaración se realizó luego de que los regantes se movilizaron para denunciar la contaminación del río por las descargas de aguas servidas que bajarían, incluso desde Tiquipaya, en la noche.