Las Fuerzas Armadas (FFAA) desmintieron la intención de militarización del Trópico de Cochabamba durante el próximo congreso del Movimiento Al Socialismo (MAS).
En pasados días, el expresidente Evo Morales y el diputado «evista» Gualberto Arispe alertaron que el Ministerio de Defensa de Bolivia tiene un plan para reforzar a la Novena División del Ejército que se encuentra en esa región, con el desplazamiento de 600 efectivos.
Según el también jefe nacional del MAS, esa acción es para la “represión” al Trópico de Cochabamba.
En respuesta a esta denuncia, el Comando en Jefe de las Fuerzas Armadas emitió un comunicado negando que se esté desplazando personal y equipamiento hasta dicha zona, sede del congreso del Movimiento al Socialismo (MAS), a realizarse en octubre de esta gestión.
“Las Fuerzas Armadas del Estado Plurinacional de Bolivia como institución que nace del pueblo y junto a la patria, desmiente categóricamente que exista desplazamiento de material y personal hacia la región del Trópico de Cochabamba lo cual es absolutamente falso, al igual que la supuesta intención de militarizar esta región”, indica parte del documento.
En la nota, las FFAA convocan a la ciudadanía a “no dejarse sorprender por estas versiones falsas, malintencionadas y subjetivas” que solo buscan “alarmar e intranquilizar” a la población. Además llamaron a mantener la tranquilidad y la calma para el normal desarrollo de sus actividades.
MÁS CONFLICTOS
Además de esta encrucijada, los «evistas» se enfrentan a otra vinculada a un bloqueo que rechaza al líder de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb).
Suman más sectores que rechazan esta medida. La dirigencia y bases de los ayllus del norte de Potosí, parte de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb), no acatarán la convocatoria de bloqueo para este lunes 4 de septiembre, aseguró el viceministro de Descolonización y Despatriarcalización, Pelagio Condori.
“No se va a permitir ningún tipo de paralización del país”, afirmó, tras una reunión con autoridades, dirigentes de los ayllus y del sector minero de Chayanta, del departamento de Potosí.
La Csutcb hizo público un instructivo que dispone no acatar el bloqueo de caminos desde el 4 de septiembre, conminando a identificar a aquellos que alienten esta extrema medida de presión, que busca destituir a Lucio Quispe, elegido como ejecutivo el 20 de agosto, para poner en su lugar al “evista” Ponciano Santos.
Condori aseguró que las diferentes organizaciones sociales apuestan por la reconstrucción económica, después de la crisis derivada de un gobierno de facto y la pandemia por el COVID-19.
“Tenemos la base social que en su mayoría no va a acatar esa convocatoria”, insistió.
Desde el Gobierno se alertó que un bloqueo nacional, de concretarse, provocará pérdidas diarias de 115 millones de dólares.