En medio del anuncio de reunión de emergencia a raíz de la conminatoria del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Evo Morales decidió someterse a elecciones primarias frente al presidente Luis Arce, con tal de preservar la unidad del Movimiento Al Socialismo (MAS).
“Nos sometamos a (elecciones) internas, no hay que tenerle miedo (…). Si el Lucho (Arce) gana, tengo que hacer campaña por el Lucho; si yo gano, el Lucho tiene que hacer campaña para mí; eso es la unidad”, dijo en su programa dominical de Radio Kawsachun Coca.
Morales, que desde el sábado bajó el tono de sus declaraciones, dijo que “es un derecho constitucional” que los militantes escojan a su candidato. “Estoy dispuesto, estamos luchando por la unidad (del MAS)”, insistió.
La propuesta de Morales difiere del mandato del fallido congreso del MAS de Lauca Ñ, entre el 3 y 4 de octubre de 2023, que lo proclamó “único candidato” para 2025 y decidió registrar la “autoexpulsión” de Arce y del vicepresidente David Choquehuanca de filas del partido.
Evo Morales
Este domingo, el líder del MAS respondió a la conminatoria del TSE, que, ante las divergencias internas sobre la convocatoria de un congreso partidario que enmiende la elección de su directiva, dio un plazo de 25 días a partir del jueves pasado.
Es que el MAS evista decidió no hacer nada más que reivindicar aquel congreso y el arcista, a través del Pacto de Unidad, llamó a un congreso paralelo en El Alto, al filo de la fecha fatal que dio el TSE, el 5 de mayo.
El TSE había definido no registrar el congreso de Lauca Ñ, en el Trópico de Cochabamba, y rechazar la convocatoria del Pacto de Unidad por ciertas irregularidades: el primero no consignó a las tres organizaciones fundadoras, las confederaciones de campesinos, de mujeres Bartolina Sisa y de interculturales, y la segunda omitió la firma de la dirección nacional del MAS, a cargo del mismo Morales.
La primera reacción el líder partidario, el sábado en la celebración de los 29 años del MAS en Yapacaní, Santa Cruz, fue anunciar una reunión de emergencia para las 08.00 del martes en Cochabamba.
Morales aclaró que el estatuto del MAS define al menos dos meses de anticipación para la convocatoria a un congreso ordinario. Sin embargo, el TSE fijó un plazo de 25 días para ese encuentro.
Los plazos corren, el MAS está expuesto a sanciones que incluso pueden llegar a la anulación de su sigla.
Sin embargo, las bases de Morales están en apronte. “Vamos defender vivo o muerto (al MAS). Si es que tiene que correr sangre en las carreteras, lo vamos a hacer”, advirtió el sábado el jiliri apu mallku del Consejo Nacional de Ayllus y Markas del Qullasuyu (Conamaq), Ramiro Cucho.
