La boleta censal preguntará este sábado 23 de marzo por los nombres completos y apellidos de todas las personas que habitan Bolivia. Ante la susceptibilidad que generó esta pregunta, el Instituto Nacional de Estadística (INE) informó este miércoles que solo es necesario dar el nombre.
La pregunta 22 del cuestionario censal, que se encuentra en la página web del INE, establece: “Cuáles son los nombres y apellidos de las personas que pasaron la noche anterior al censo en esta vivienda” e inmediatamente deberá definir si es el jefe del hogar, esposa, concubina, hijas y demás personas.
A esta pregunta también deberán responder todos los miembros del hogar o habitantes del inmueble porque no hay una casilla que sea opcional.
En la pregunta 29, además, dice: “¿Tiene o tuvo cédula de identidad boliviana?”. En este caso, las respuestas se reducen a “sí”, “no”, o “cédula boliviana de extranjero”; y no exige que se dé el número de carnet de identidad del ciudadano.
El Gobierno, en reiteradas oportunidades, informó que las respuestas a cada una de las preguntas permitirán generar políticas públicas en beneficio de la población. ¿Cuál es la necesidad de saber el nombre completo de las personas? La periodista Amalia Pando advirtió que esta pregunta “no es justa” y fue reforzada por el periodista Carlos Valverde.
“Ya no es un censo, se convierte en un empadronamiento porque tú le estás dando al Estado los datos más íntimos de tu familia con nombre y apellido. El Gobierno tendrá un archivo informativo a su disposición y esto es una observación que a mí me parece de fondo”, sostuvo Pando.
Martha Oviedo, coordinadora nacional del Censo 2024, aseguró en una conferencia de prensa que no será necesario dar el nombre completo pese a que la boleta censal así lo exige. “Nosotros sí preguntamos por el nombre, pero no es con una situación de tener el nombre completo. Nos dicen: ‘María es la jefa de hogar’ para tener la relación (familiar): María es la jefa de hogar, tiene dos hijos; un hijo es varón, otra hija es mujer y tiene un esposo”.
“Entonces –agregó Oviedo– es para tener la relación y para no perder el control de cuántas personas están en la casa. Solamente es por eso que se pregunta el nombre, para tener una relación, a quién estamos consultando”.
La senadora por la agrupación cruceña Creemos, Centa Rek, declaró que la población no tiene la obligación de brindar sus datos de filiación como son el nombre y apellido, como tampoco su número de identidad, puesto que el objetivo del censo es tener “datos habitacionales, demográficos, económicos y sociales para establecer estadísticas que proyecten un crecimiento del país o la (elaboración) de planes donde se consideren esta información, no la filiación”.
El jefe Nacional de Temática del INE, Iván Adalid Márquez Callisaya, dijo que desde el año 1900, en todos los censos que se realizaron en Bolivia, siempre se pidió el nombre y apellidos de los empadronados. “Si revisamos los Censos desde 1900, se ha pedido nombres y apellidos (…) y se ha mantenido el secreto estadístico y la confidencialidad. Como cualquier oficina de estadística, esto lo hacemos cumplir”, expresó.
Sin embargo, en el capítulo “F – Principales características de la persona” de la boleta censal del 2012 sólo se solicita “Nombre de la persona” y no así su apellido como se solicita en la boleta del Censo 2024.
El INE aclaró que las personas que no participen del Censo no tendrán ninguna sanción. Empero, invitó a toda la población para que sean censados porque su participación permitirá la planificación y ejecución de políticas públicas para su barrio, municipio, departamento y el país en su conjunto.
